sábado, 18 de noviembre de 2006

Querría seguir con el tema

La importancia que tiene la teoría del mundo Akásico en el entendimiento de nuestro universo, me obliga a terminar el resumen que hacía, a pesar de lo rrollo que pueda parecer, aunque no sea más que en atención a alguien que se haya quedado a medias.

El efecto del campo A en el mundo de los seres vivos

Hay un efecto del campo A a través de la naturaleza, ya que el campo A también afecta a los organismos. En el mundo de los seres vivos los hologramas individuales de las moléculas y de las células que constitu­yen un organismo concuerdan con el holograma que engloba al organismo completo. Existe, en consecuencia, una correlación sutil pero efectiva entre las moléculas, las células y los órganos de un organis­mo, produciendo una coherencia casi instantánea dentro del mismo. Esta relación existe tanto si las moléculas y las células se encuentran próximas entre sí como si están distantes. Tal y como hemos visto, los experimentos muestran cómo las células que una vez pertene­cieron a un determinado organismo permanecen conectadas con él incluso cuando se encuentran a kilómetros de distancia del mismo. La información a través del campo A justifica no sólo la coherencia cuasi-instantánea existente entre todas las partes de un organismo, sino también la correlación sutil pero efectiva entre los diversos organismos y su entorno. Los hologramas de las colonias, grupos y comunidades enteras de organismos son conjugados con el holograma de la ecología del cual forman parte. Este último, en el cual los organismos se encuen­tran integrados, consigue la correlación de todos ellos en dicha ecología llegando hasta la estructura de su genoma. De ese modo, la variación continua del genoma es in-formada de forma sutil, aumentando las pro­babilidades de que, cuando el medio cambie, el genoma aparecerá con mutaciones que serán viables dentro del nuevo entorno. CONCLUSIÓN... Más allá de un mundo inundado por los enigmas a los que nos tienen acostumbrados, las ciencias dominantes, está emergiendo un nuevo con­cepto del universo, que trasciende las ideas establecidas; en lugar de ellas aparece un concepto nuevo y viejo al mismo tiempo: el universo informado, que tiene sus raíces en el redescubrimiento de la tradición ancestral del Campo Akasha como holocampo basado en el vacío. Den­tro de este concepto, el universo es un sistema coherente con un grado alto de integración, asemejándose a un organismo vivo. Su propiedad más importante es que la información es generada, conservada y trans­mitida por y entre todas sus partes. Esta característica es totalmente fundamentaL Es capaz de transformar un universo, que se dirige a cie­gas desde una fase de su evolución a la siguiente, en un sistema estre­chamente interconectado que se construye a partir de la información que ya ha sido generada. El universo informado es de una coherencia extraordinaria. Todo lo que sucede en un lugar, acontece también en otros lugares; todo lo que sucedió una vez, vuelve a suceder también muchas veces después. Nada en este mundo es local, limitado a donde y cuando sucedió. Todas las cosas son globales cósmicas, para que la memoria de todas ellas se extienda a todos los lugares y en todos los momentos. Esta es la sustancia del universo informado, la visión del mundo que será la seña de identidad de la ciencia y, a la postre, de la sociedad, en el transcurso del siglo XXI.

Un campo cósmico que subyace y conecta a todas las cosas en el mundo constituye una intuición perenne, que está presente en la meta­física y en las cosmologías tradicionales. Los antiguos ya sabían que el espacio no está vacío: lo que existe y ha existido siempre es el origen y la memoria de todas las cosas. Pero este conocimiento estaba basado en una percepción mística o filosófica, producto de una experiencia perso­nal e irrepetible. A partir de ahora, este no va a ser el caso. Se redescubre de nuevo el campo de información de la naturaleza como la vanguardia de la ciencia contemporánea. Ha emergido primero como una fábula poderosa y, a partir de allí tras una investigación continua que especifi­ca y profundiza en la teoría del campo A, se constituye en el concepto del universo de la ciencia del siglo XXI.

lunes, 13 de noviembre de 2006

ME OLVIDÉ DE VIVIR...

De tanto correr por la vida sin freno Me olvidé que la vida se vive un momento De tanto querer ser en todo el primero Me olvidé de vivir los detalles pequeños... Así reza la canción de Julito Iglesias, que a veces inspirado, las ha escrito bonitas. Espero que no me pase lo que a su personaje a continuación... Me quedé sin amor una noche de un día De tanto jugar con quien yo más quería Perdí sin querer lo mejor que tenía... Viajar, correr por los aeropuertos, batallar por los padocks... Por eso descuidé a los que quiero. Pero os prometo que voi a dedicaros más tiempo entre otras cosas, a comunicaros lo que me inspiran vuestros blogs que es mucho... Para morenita-Kit Kat- piscinera, que espera tanto... ¡ I LOVE U SO MUCH DARLING !

lunes, 6 de noviembre de 2006

El efecto del campo A en el cosmos

El campo A relaciona cosas y sucesos del universo a través de las ondas de torsión en el vacío a velocidades asombrosas, más de mil millones de veces superiores a la velocidad de la luz. Las figuras de interferencia de las ondas de torsión crean hologramas de escala cósmica, los hologramas de las estrellas de los sistemas estelares enteros. Estos hologramas se extienden a través de todo nuestro universo correlacionando sus galaxias y las otras macroestructuras.

Las figuras de interferencias de las ondas de torsión de las estrellas y de los sistemas estelares crean el holograma de toda la galaxia, y las interferencias de las ondas de torsión de la megagalaxia (el conjunto de todas las galaxias) generan el holograma del universo. Este último holograma es conjugado con el holograma de las galaxias, de modo que este holograma integrador que crea la coherencia entre todas ellas, consigue correlacionar los caminos de su evolución. Este efecto del campo A es extremadamente sutil aunque efectivo: las estrellas y las galaxias evolu­cionan de manera coherente a lo largo de todo el universo, incluso a través de distancias que podrían no haber sido recorridas por ninguna luz o señal conocida por la física moderna.

El "ajuste fino" de las constantes universales, es decir, el por qué los pará­metros fundamentales del universo se encuentran coordinados de una forma tan sorprendente de modo que los sistemas complejos como nosotros mismos pueden aparecer en él, es asimismo un efecto del campo A. Sabemos que el Big Bang fue increíblemente preciso en relación a sus parámetros, y que la densidad-energía del vacío lo fue también para que las partículas creadas en la explosión no volaran distan­ciándose antes de que pudieran condensarse en galaxias y en estrellas, y en una variedad de planetas con la potencialidad de albergar vida en ellos. En un universo con un ajuste menos fino, no habríamos podido estar aquí para maravillarnos con estas precisiones. Con sólo una minúscula desviación (tan pequeña como una milmillonésima del valor de una de las fuerzas universales como el electromagnetismo o la gravedad, o un diminuto exceso en la energía-densidad del espacio), el universo habría sido incapaz de producir las condiciones para que los organismos vivientes pudieran emerger y evolucionar.

¡Prodigioso y fascinate el desarrollo del universo ¿eh?!

Estoy preparando un resumen más didáctico porque creo que el tema lo merece. Comprendiendo que a algunos les resulte "insufrible", tomado paso a paso puede llegar a entenderse teniendo en cuenta que:

¡participamos muy directamente en ello!

viernes, 3 de noviembre de 2006

EL MUNDO AKÁSICO

Hoy me gustaría hacer balance.

Del libro : La ciencia y el mundo Akásico ( Ervin Laszlo)

Tenemos un conjunto de enigmas ante noso­tros y una serie de fábulas que intentan explicarlos. Incluso aunque estén formuladas dentro de distintos marcos teóricos, todas las fábulas com­parten una conclusión fundamental: las cosas, en el mundo real, no están totalmente separadas unas de otras. No sólo es que estén unidas por flujos de energía, sino que también están enlazadas por flujos de infor­mación. ¿Cómo se establece realmente este vínculo? Ésta es la cuestión relativa al efecto del campo Afásico (campo A) sobre el mundo y es la cuestión que vamos a abordar ahora.

Los distintos efectos del campo A.

Que el campo A informa todas las cosas con todas las demás, se deduce como la explicación más simple y más significativa de la no-localidad y el enmarañamiento que hemos encontrado en la física y en la cosmología, así como también en la biología y en la investigación de la conciencia. Pero en sí misma, ésta también es una “fábula”, aunque sea una muy posible, y no (o no solamente) una teoría científica. Necesitamos expli­car también cómo funcionó el campo A. Explorar el funcionamiento del campo A no es nada sencillo, ya que el campo A no puede percibirse. Sin embargo, este campo no es un fantasma imaginario, ya que produce un efecto y este efecto sí puede percibirse. Ésta es la regla y no la excepción en relación con los otros campos postulados en la ciencia. Por ejemplo, el campo gravitatorio no puede percibirse: cuando dejamos caer un objeto al suelo, lo vemos caer, pero no vemos el campo que lo hace caer, es decir, vemos el efecto del «campo G», pero no el campo G en sí mismo. El efecto del campo G es la fuerza gravitatoria entre masas separadas, el efecto del campo EM es la transmisión de las ondas electromagnéticas y el efecto de las fuerzas nucleares fuerte y débil es la atracción o repulsión entre masas extremadamente próximas unas de otras. ¿Pero cuál es, con precisión, el efecto del campo A? Hemos dicho que sabemos qué es lo que produce el efecto del campo A: es el vacío cuántico. La cuestión es cómo el campo A del vacío afecta a las partículas y a las cosas más complejas que son conjuntos integra­dos de partículas, los átomos y las moléculas, las células y los organis­mos, y las estrellas y galaxias, que existen en el espacio y en el tiempo. El efecto del campo A transmite información a todas las cosas con todas las otras cosas. Es universal, pero no es universalmente intenso y evidente. La información Universal en la naruraleza no significa una información Uniforme. El campo A transmite la información más directa, intensa y, por consiguiente, evidente, entre las cosas que son muy simi­lares entre sí (es decir, que son ”Isomórficas”, poseen la misma forma básica). Esto es debido a que la información contenida en el campo A lo es a través de las figuras de interferencia superpuestas de las ondas del vacío y que son equivalentes a los hologramas. Sabemos que en un holograma cada elemento concuerda con los elementos que son iso­módicos: con aquellos que son similares a él. Los científicos denomi­nan a dicha concordancia con el término «conjugación», una figura holográfica similar es conjugada con figuras similares en cualquier colección de las mismas, aunque su número sea muy grande. La experiencia práctica nos confirma lo anterior. Empleando la figu­ra conjugada como la «clave», podemos identificar cualquier otra figura individual en la figura compleja ondulatoria de un holograma. Sólo nece­sitamos insertar la figura ondulatoria dada en el maremágnum de figuras del holograma y ésta se asociará con sus correspondientes conjugadas. Esto es lo mismo que hacemos también al elegir de entre los millones y millones de páginas web en Internet la que nosotros necesi­tamos. Lo que hacemos es introducir el código de la página, su URL, y el sistema busca su identificación exacta con el sitio al que corresponde el código. Con ello conseguimos abrir el acceso que queremos de entre la enorme multitud de accesos que se encuentran en la Web. Cuando aplicamos el principio de la conjugada a las figuras de interfe­rencia en el campo A, lo que obtenemos es una imagen simple y lógica. Los objetos son «in-formados» de forma directa por los otros objetos que muestran un mayor parecido. Por ejemplo, una ameba es informada directamente por las otras amebas. Pero esto no significa que entre las cosas que son muy diferentes entre sí no exista una vía de información misma. También intercambian información, pero el efecto no es tan evi­dente en todos los casos. Las amebas son informadas por otros organismos unicelulares, y también lo son por entidades mucho más simples como las moléculas, o mucho más complejas como los organismos multicelulares. Pero la información recibida de los objetos que pertenecen a otros niveles es menos intensa y evidente que la que se comparte con los objetos que se corresponden con el mismo nivel, lo mismo sucede con los seres huma­nos. Recibimos una información directa de nuestros propios congéneres, aunque seamos también informados, de forma menos directa, por los animales, las plantas, y por toda la naturaleza. La información a través de las trazas holográficas en el campo A sintoniza de forma sutil con todas las otras cosas y da cuenta de la coherencia que encontramos en la natura­leza viviente, así como en el cosmos como un todo.

Continuará… si os interesa.

jueves, 2 de noviembre de 2006

Desde la escadez a la abundancia

Cuando actuamos desde la idea de la escasez, no podemos dar ya que lo que demos disminuye nuestro patrimonio. Haciéndolo desde la idea de la abundancia, cuanto más damos más ricos somos... Esto es aplicable en todos los órdenes y a todas las cosas. Solo tenemos que mirar a nuestro interior, hacerlo con humildad y sinceridad, concienciándonos de que, actuar desde el miedo solo hace que creemos más miedo. Si ese miedo lo diluímos con la potencia del amor, estaremos actuando también desde la abundancia.